No es habitual que una voz africana se pronuncie en foros internacionales sobre los problemas de su propio continente. Se ha convertido en una especie de tradición que otros hablen y decidan desde lejos, cantantes famosos incluidos. África ha servido a algunos para hacerse los buenos. Los africanos no somos niños, afirma la economista Dambisa Moyo (Zambia, 1969), que justifica sus reproches con copia de datos y propuestas. Critica duramente las ayudas económicas al desarrollo, las que se conceden de gobierno a gobierno, cierran las puertas del mercado, reprimen el progreso, generan corrupción y han llevado a buena parte de África a una situación peor que hace cincuenta años. Ya es hora de que los países africanos (como Suráfrica, como Bostwana) empiecen a producir y vender. Pone el ejemplo del hombre emprendedor que confecciona mosquiteros, hasta que un envío caritativo del mismo producto le trunca el modesto negocio.
Artículo aparecido en El Cultural.